Por Martín Corona Jerez (1)
“Yo a Camilo lo recuerdo alegre, como en eterna primavera, pues lo conocí en medio de la alegría de vivir en una patria liberada, donde é tuvo la satisfacción de ser actor de primera línea”, dice el bayamés Robert Arnaldo Paneque.
Nacido en 1921, Paneque resulta uno de esos hombres casi imprescindibles en el pueblo, por la cantidad de personas que conoce y ayuda de una u otra manera, su amplio archivo de materias diversas, larga trayectoria revolucionaria y celo constante alrededor de los intereses colectivos.
Fue barbero, periodista, director de periódicos, presidente dela Asociación CívicaTodo por Bayamo, fundador y primer tesorero del Movimiento 26 de Julio (M-26-7) en la localidad y activo colaborador del Ejército Rebelde.
En 1959 lo nombraron jefe de Orden Público y responsable de Divulgación y Cultura del M-26-7 en el municipio, y en esas andanzas trató personalmente con el Héroe de Yaguajay, al cual había ayudado de forma indirecta mediante el envío de hombres y recursos a las guerrillas del llano.
Recuerda que el triunfar la Revolución se manifestaron diversas tendencias en el seno del Movimiento en Bayamo y otros lugares, y acerca de esa situación conversó con el Comandante en Jefe Fidel Castro.
Posteriormente, cuando la dirección del país organizó la llamada Operación Granma, que tuvo existencia efímera y entre sus objetivos el de lograr la unidad de los revolucionarios, Camilo orientó nombrar a Robert delegado de la misma en la zona, y así se hizo.
“Desde la primera vez que hablamos, en el hotel Central, de esta ciudad, el trato fue como a un viejo amigo, pues ya me conocía por la ayuda a los guerrilleros del llano.
“En junio de 1959, organizamos un acto en la plaza Rabí (hoy del Himno Nacional), a fin de repudiar el ofrecimiento de 10 mil novillas preñadas, hecho por la Asociación de Ganaderos de Cuba con el propósito de mediatizar o detenerla Reforma Agraria.
“Enterado de que Camilo estaba cerca de Bayamo, lo invité, él vino en una caballería junto a otros dirigentes, le habló al pueblo y fue cuando dijo la conocida frase: ´Con novillas y sin novillas, les partiremos la siquitrilla´.
“Él tenía una sensibilidad especial, no olvidó a ninguno de los que le ayudaron cuando en 1958 llegó a los llanos del Cauto, y al hablar expresó, más o menos:
“Cuando llegamos a la zona de Cauto del Paso, los campesinos nos abrieron las puertas de sus hogares y de sus corazones; con ellos compartimos la cama y la mesa, y hoy que la Revolución ha triunfado venimos a decirles:
“Campesinos, hermanos, en los momentos en que nosotros sólo teníamos la esperanza de la victoria, ustedes fueron generosos, por eso vengo a decirles que la revolución triunfó y en ella tendrán una fuente de apoyo, inspiración y confianza.
“Después fui recibido por él enLa Habanay facilitó el avión solicitado para recoger a varios bayameses que formaban un coro, fueron de gira a países centroamericanos y, no recuerdo por qué razón, se habían quedado allá. Cuando regresé a Bayamo, ya ellos estaban aquí.
“Me llamó la atención la familiaridad de los subordinados al tratar a Camilo. En la casa donde me recibió, vi a dos primos míos y a Ernesto Guevara Cervantes (Tétiro), de Cauto Embarcadero, quienes habían peleado bajo sus órdenes, mostraban plena confianza y hasta usaban jaranas entre todos”.
SIGUE EN SU PUEBLO
“Pienso que debe resaltar cada día más la presencia de ese héroe en Bayamo y sus alrededores, porque luchó mucho en estos llanos, restructuró el Movimiento 26 de Julio, atacó la ciudad y ganó la simpatía de todos cuantos lo conocieron.
“Observo un gran interés en la juventud por las cosas de Camilo, algo muy positivo y demostración de que sigue viviendo en el pueblo.
“Me alegra ver cómo los integrantes del contingente Celia Sánchez Manduley, que construyen la presa Cauto del Paso, están erigiendo en saludo al próximo 28 de octubre un monumento en La Estrella, sitio bayamés donde tuvo lugar uno de los más encarnizados combates del llano.
“La anécdota que más recuerdo tuvo carácter simbólico, ocurrió cuando él venía para el acto al cual lo invité en Bayamo, la caballería se encontró con un ómnibus de pasajeros y todas las personas bajaron a vitorear al querido comandante.
“En medio de la alegría, una muchacha se quitó la flor que traía en el pelo y dijo: ´Vaya, una flor para Camilo.´” (FIN)
(Septiembre de 1989)
(1) Corona Jerez, Martín (Niquero, 1951): Licenciado en Periodismo. Ha trabajado en diversos medios de difusión en la provincia cubana de Granma, incluyendo las corresponsalías de los servicios informativos dela Televisión Cubana y dela Agencia de Información Nacional. Escribe artículos, comentarios y crónicas de temas históricos. Trabajos suyos han visto la luz en órganos provinciales y nacionales, entre éstos Granma, Bohemia, Verde Olivo, Opciones y otros. También en las revistas Habanera y Prisma. Es miembro dela Sociedad CulturalJosé Martí,la Unión Nacional de Historiadores de Cuba y dela Unión de Periodistas de Cuba.